4.10.2013

Días gafes

De verdad, creo que alguien me ha gafado. Antes de ayer tenía una práctica a la que debía de ir sí o sí y para variar salí de casa camino a la universidad con la hora pegada al culo -sí, ya lo sé, culpa mía, pero como he dicho alguna vez, creo que soy adicta a la adrenalina que me proporciona hacerlo todo a la última hora-. Y cuando por fin estoy subiendo al autobús (..) voy a pasar la tarjeta por el sensor y piiipiiiipiiii, se enciende el maldito piloto en rojo acompañado de ese pitido horripilante en señal de: ¡Oye bonita, los 30 días de pago te finiquitaron ayer!. Bien, ¡co-jo-nu-do!

Pero bueno, tras discutir con el conductor, porque encima no llevaba ni un puñetero céntimo encima (...en fin...), acabó mirándome con cara de  'pasa anda, pasa (...)' y así fue. El caso es que conseguí llegar a tiempo a la práctica, la cual fue una chuminá como un piano de cola, pero al final de la clase, cuando ya pensaba que mi día no podía ir a peor... -JAJAJA ¡Pero qué ingenua!- cuando voy a bajarme de la tarima después de entregarle mi práctica en cuestión al profesor, giro sobre mis talones, me resbalo, y me pego la gran hostia padre delante de todos mis compañeros y profesor incluido. 


Quizá no fue exactamente así, pero creo que se capta la situación.

Sin lugar a dudas, creo que lo archivaré como uno de los momentos más absurdos y bochornosos de mi época universitaria.
______

Y aunque el martes no fue tan abusivo en ese sentido, aseguro que me tiré de 9 a.m. a 12 p.m. dando el callo. Quedándome sin vida propia. :'(

______

Esta mañana necesitaba escanear unos ejercicios con relativa urgencia, pero fui con calma (...) porque total en casa tienen una super-mega multifunción, pero claaaaroooo (...), yo ya no recordaba que la semana seguía siendo la misma: la semana gafe de mierda. Entonces como era de esperar la máquina decidió no funcionar -ya sabéis cómo de guasona a veces decide ser la tecnología ¬¬- así que me tuve que bajar a una tienda. Y teniendo en cuenta que cerca de casa hay como unas 4 o 5 papelerías, ¿sabéis a cuál fui?, ¡¿sabéis a cuál fui?! ¡¡¡Sííííííííí!!! A la que me tuvieron esperando 3/4 de hora para escanear una cara de un folio y enviarlo por correo con éxito.


Estoy desolada. Aún es miércoles...


1 comentario:

Aydita dijo...

Todas tenemos malos días! besos